Pequé, pequé Dios mío...
Pequé el momento en que los labios se unieron
frente al campanario
de una capilla
en un campo de mi isla.
Cuando disfruté del extraño sonido de dos bocas inexpertas
y el eco del aire entre bocados de amor.
Pequé cantando salmos
pensando en la sensación de tu mano musical sobre la piel
la fantasía de un alba de monaguillo hecha trizas
el guiño de tus ojos entre el incienso.
Pequé bailando junto a tu cuerpo
haciendo un rosario con gotas de sudor
y la señal de la cruz con la fortaleza entre tus piernas.
Pequé al coquetear entre los Ave Marías y la catequesis
justo al momento en que me arrodillaba a cumplir la penitencia
pasando sobre tus piernas
instigándote en un temblor
cerrando los ojos y boca sobre el pliegue de las manos.
Pequé y me acompañaste
en un vía crucis de hormonas
donde el monte calvario fue nuestra gloria
y nunca hubo muerte
ni corona de espinas
donde sólo hubo una cruz…
la sombra de nuestras piernas
rodeada de energías iniciadas.
Pequé hace dos décadas atrás.
Pequé esta mañana al soñarte en mi cuarto.
Pequé al pensarte a lo lejos.
Pequé al revivir recuerdos y hacer plegarias con estas santas letras.
Y.S.B. © 2007
Dedicado a Carlos Daniel Rodríguez, mi primer novio, amor de mi recién comenzada adolescencia…por los años que nos quisimos, por la despedida temporera de nuestra relación y por mantenernos amigos a pesar de las décadas. Felicidades en tu cumpleaños el cual, una vez más, coincidiócon Semana Santa. Un beso frente a San Miguel! Y.S.
frente al campanario
de una capilla
en un campo de mi isla.
Cuando disfruté del extraño sonido de dos bocas inexpertas
y el eco del aire entre bocados de amor.
Pequé cantando salmos
pensando en la sensación de tu mano musical sobre la piel
la fantasía de un alba de monaguillo hecha trizas
el guiño de tus ojos entre el incienso.
Pequé bailando junto a tu cuerpo
haciendo un rosario con gotas de sudor
y la señal de la cruz con la fortaleza entre tus piernas.
Pequé al coquetear entre los Ave Marías y la catequesis
justo al momento en que me arrodillaba a cumplir la penitencia
pasando sobre tus piernas
instigándote en un temblor
cerrando los ojos y boca sobre el pliegue de las manos.
Pequé y me acompañaste
en un vía crucis de hormonas
donde el monte calvario fue nuestra gloria
y nunca hubo muerte
ni corona de espinas
donde sólo hubo una cruz…
la sombra de nuestras piernas
rodeada de energías iniciadas.
Pequé hace dos décadas atrás.
Pequé esta mañana al soñarte en mi cuarto.
Pequé al pensarte a lo lejos.
Pequé al revivir recuerdos y hacer plegarias con estas santas letras.
Y.S.B. © 2007
Dedicado a Carlos Daniel Rodríguez, mi primer novio, amor de mi recién comenzada adolescencia…por los años que nos quisimos, por la despedida temporera de nuestra relación y por mantenernos amigos a pesar de las décadas. Felicidades en tu cumpleaños el cual, una vez más, coincidiócon Semana Santa. Un beso frente a San Miguel! Y.S.
10 Comments:
Bendito sea el pecado!!!!
un abrazo
Hermoso escrito... me encantó
Hermoso! Precioso! Ya lo he leido varias veces y la verdad es q este poema quedo hermoso. Como dijo la amiga Ana Maria: Que viva el pecado!!
Un abrazote!
Preciosos versos!
Dejo un abrazo desde Buenos Aires.
MentesSueltas
Como siempre hermosos mi querida Yiara. Ud y sus versos son la mejor armonía.
Querida compueblana Yiara. Espero que te encuentres bien y cosechando exitos. Te dire que me ha facinado tu escrito. Lleno de imagenes y sentimientos que calan hondo en la mente y el corazon de las personas.
Me encanto cuando dices: "Pequé y me acompañaste en un vía crucis de hormonas donde el monte calvario fue nuestra gloria y nunca hubo muerte ni corona de espinas donde sólo hubo una cruz…la sombra de nuestras piernas"...pura sensualidad...que exito. Cuidate...
Brindo por aquellos amores que dejan huella en nosotros...
Me uno al coro de quienes evocan, promueven y aman esos gloriosos pecados.
A.
Afortunado ese carlos Daniel, por quien pecaste...
Un saludo: tiempo sin venir pero aquí me tiene
Me encantó estooooo! Ya sabes que me fascina la mezcla de lo profano y lo divino, porque no son excluyentes...
uuuuf...yo también pequé ¿quién no ha pecado? Si pecar es lo nos hace irremediablemente, exquisitamente humanos.
Excelente poema!!
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